¡La vida en “ultracongelación”!
Los intercambiadores de calor Bowman proporcionan calefacción vital para la estación de investigación antártica Halley VI.
Refrigerar un crucero fluvial portugués
Si no puede soportar el calor, ¡consiga un intercambiador de calor Bowman! Cómo los intercambiadores de calor Bowman han resuelto un enorme dolor de cabeza debido a la refrigeración para una compañía portuguesa de cruceros fluviales.
El río Duero es uno de los más bellos y económicamente más importantes de Portugal y da soporte a una próspera industria turística basada en cruceros fluviales que exploran los tramos superiores del valle del Duero. Una de las compañías líderes que operan estos cruceros es Barcadouro, que ha operado una flota de cruceros fluviales desde su base de Oporto durante casi 20 años.
La última incorporación a la flota, el «Independencia», es su catamarán insignia y el primer buque de este tipo en operar en el río Duero. Sin embargo, al preparar la embarcación para sus operaciones en el río, surgió un problema importante con la refrigeración de los dos grupos electrógenos a bordo del barco que funcionan con diésel.
Marinando motores industriales
Para impulsar los dos generadores que proporcionan electricidad a todas las áreas del barco fueron instalados dos motores John Deere. Sin embargo, una ventilación deficiente de la sala de máquinas provocaba que la temperatura ambiente superara los 50 °C cuando los motores se encontraban funcionando. ¡Esta acumulación de temperatura elevada del aire generaba una pérdida significativa de la potencia del motor!
Barcadouro contactó con el distribuidor de intercambiadores de calor de Bowman, Transdiesel S.L. para encontrar una solución que aliviara la situación.
Una solución para reducir el calor
Los ingenieros de Transdiesel propusieron un sistema de refrigeración altamente eficiente basado en intercambiadores de calor del tanque de cabecera Bowman FH200 para enfriar el agua de la cubierta del motor, más unos enfriadores de aire de sobrealimentación Bowman FG100 para el aire de admisión del motor. Una vez instalado, el nuevo sistema redujo con éxito la temperatura de la sala de máquinas a solo 25 °C, restaurando totalmente la potencia del motor. También se eliminó la posibilidad de tener que reemplazar los motores John Deere por motores alternativos en caso de no encontrar una solución adecuada ¡ello hubiera supuesto un importante costo adicional! El nuevo sistema de refrigeración ha demostrado ser extremadamente eficiente, permitiendo que el catamarán entre en servicio completo en el río y proporcionando un enorme placer a los numerosos turistas que acuden a la región cada año.
